SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
 número3Que el diablo no te quemeEl papá cuate índice de autoresíndice de assuntospesquisa de artigos
Home Pagelista alfabética de periódicos  

Serviços Personalizados

Journal

artigo

Indicadores

Compartilhar


Metaphora

versão impressa ISSN 2072-0696

Metaphora (Guatem.)  n.3 Guatemala nov. 2004

 

LA LETRA (Columna mensual del GEPG en "El Periódico")

 

El decir de Ronald: una nueva leyenda de Guatemala

 

 

Carlos Seijas

Grupo de Estudios Psicoanalíticos de Guatemala

 

 

Fruto de nuestro legado occidental y del ingenio colonial, Guatemala es una palestra de leyendas y relatos de aparecidos, difuntos y fantasmas, manifestaciones del inconsciente colectivo chapín que engalanan nuestras tradiciones. Así nos encontramos con las obras de autores como Francisco Barnoya Gálvez, Miguel Ángel Asturias Rosales y Celso Lara, quienes han recopilado ésta rica y antigua tradición oral. Quién no recuerda esas noches cuando los abuelitos nos contaban la Leyenda del Sombrerón y sus conquistas, la de la Ciguanaba, la de la Llorona y sus hijos asesinados, la del Cadejo y los Bolitos, la de las Santas Ánimas del Purgatorio y tantas otras que aún recorren nuestros infantiles recuerdos. Lo que me ha llamado la atención es que fieles a esta tradición, los chapines seguimos enriqueciendo nuestro acervo de leyendas, y es por ello que ahora quisiera compartir con ustedes el relato de una de las nuevas leyendas de Guatemala a la que se me antoja titular "El Decir de Ronald". Me cuentan, de buena fuente, que en el restaurante McDonald's de la antigua Guatemala dicen que en la madrugada estaban realizando los oficios propios que siguen al cierre del local, en este caso me refiero a dos muchachos que se encargan de las tareas de limpieza, como barrer y trapear. Uno de dichos muchachos se encontraba más cerca del muñeco del payaso Ronald. Luego de estar aseando por un buen rato el chico que se encontraba cerca del muñeco dijo: "Estoy muerto vos, como cansa eso de estar limpiando, me duele la espalda"; entonces, el payaso se levantó y dijo: "Yo también estoy cansado de estar aquí sentado". Escuchando esto ambos empleados, el que estaba más cerca, palideció y cayó tirado, el otro, quedó petrificado y cuando pudo reaccionar fue a ver a su amigo quien estaba en estado de coma.

Desde entonces se cuenta que por eso, ahora se aparece Ronald en esa calle y la mayor parte de la gente, no quiere comer cerca del payaso, por temor a que les hable. Dicen que los directivos del restaurante no han dado declaraciones al respecto, y han solicitado que no se le llame "El Payaso Ronald" sino "El Personaje de Ronald McDonald". Tanto revuelo ha causado que ahora la gente dice que el Camperonix y Ronald se batirán en un duelo a muerte en la Calle de los Duelos. Es inquietante que, al igual que en los antiguos relatos de brujas y hechiceros, sea la palabra, materializada en "el decir de Ronald", el desencadenante que provocara que los muchachos quedaran petrificados tal como lo solía hacer la Medusa otrora en Grecia; ya que de nuestras leyendas, digo las guatemaltecas, ningún personaje le habla directamente a otra persona, y la única que dice algo es la Llorona pero lo grita al viento. Por el contrario, Ronald nos regala una nueva palabra mágica: "Yo-también-estoy-cansado-de-estar-aquí-sentado", esta locución quedará en los libros de magia para petrificar personas, junto con otras inmortales como: Abracadabra patas de cabra, Alacazám, Schazám o las que nos lega el postmoderno aprendiz de mago Harry Potter como Imperius, Cruciatus o el mortal Avada Kedavra. Parece curioso este nuevo legado que nos da la globalización, pues según me cuentan, la casa en la que construyeron el restaurante, fue reconstruida. La casa original estaba abandonada desde hacía muchos años y se creía embrujada, pues se habían escuchado y visto fantasmas en ella; ahora estos seguramente se han actualizado y decidieron poseer al muñeco del conocido personaje. Ya el mercado global nos ha dejado sin el Sombrerón, la Ciguanaba, la Llorona, el Cadejo, ahora Ronald y Camperonix atormentan la mente de los Antigüenos. ¿Qué vendrá después? Mientras esperamos más de las nuevas leyendas de Guatemala, me han contado, también de muy buena fuente, que se vio al Sombrerón y a los demás fantasmas antigüenos pasando la frontera de mojados, para ver si en el norte pueden conseguir trabajo. No quisiera terminar estas palabras sin agradecer a mi buen amigo el historiador Johann Melchor, quien ha sido mi buena fuente de información.

Creative Commons License Todo o conteúdo deste periódico, exceto onde está identificado, está licenciado sob uma Licença Creative Commons