EDITORIAL
DOI: 10.11606/issn.1806-6976.v11i3p120-121

Adolescencia, salud mental, drogas y violencia

Ana Maria Pimenta Carvalho

Coeditora, SMAD - Revista Eletrônica Saúde Mental Álcool e Drogas. Profesor Asociado, Escola de Enfermagem de Ribeirão Preto, Universidade de São Paulo, Centro Colaborador de la OPAS/OMS para el Desarrollo de la Investigación en Enfermería, Ribeirão Preto, SP, Brasil, e-mail: anacar@eerp.usp.br

La población adolescente estimada en Brasil es de 21 millones, no es en vano, este segmento está ocupando espacios en los medios de comunicación, debido al aumento de la delincuencia en el que los adolescentes tienen una participación activa, esto  ha generado acalorados debates sobre la reducción de edad legal. Sin embargo, poco se habla  sobre la violencia sufrida por el adolescente que terminan siendo mano de obra barata, y fácilmente disponible en el contexto de las prácticas ilegales. Hay que añadir a eso que el ideal de masculinidad es medido a través de la valentía, el coraje y el dominio del  miedo, lo que pone especialmente a  los adolescentes varones, en una mayor condición de disponibilidad a que se adhieran a la práctica de actos antisociales e ilegales.

Al hacer esto, el adolescente también expone la hipocresía de los adultos con respecto a estas prácticas, lo que obliga  a revisar las reglas y las leyes, lo que conduce infelizmente al  tema de la reducción de la edad legal.

Aunque  algunos sectores de la sociedad argumentan en el sentido  contrario, estas voces son menos escuchadas y siempre es importante recordar que los comportamientos se aprenden, y es deber del adulto proporciona las condiciones de aprendizaje que conducen a la apreciación y el respeto por la vida. Son estos dos índices importantes de la Salud Mental, cuya construcción es un proceso complejo que se produce a lo largo del desarrollo de la persona, aunque los cimientos de esta construcción  parten de los períodos que comprenden la infancia y la adolescencia. Desde la hora de la construcción, un individuo se forma en el contexto del establecimiento de relaciones con las personas que le rodean. Es con ellos que  aprende las formas de pensar y actuar en el mundo. Un contexto violento y de explotación  conduce a la construcción de  individuos  violentos.

A pesar que tendamos la tendencia  de tener representaciones no realistas de la adolescencia, como una etapa ruidosa, desordenada pero inofensiva, algunas veces agresiva y por lo tanto peligrosa, se sabe que hay diferentes maneras en que los adolescentes viven esta etapa de la vida y para una parte significativa este número de personas, las condiciones que los rodean no son lo suficientemente buenas o incluso son muy malas. En dos trabajos de destaque  en el presente numero de la SMAD, son analizadas las circunstancias que facilitan el uso de drogas⁽¹⁾ (legales e ilegales) y, entre ellas,  se encuentra la convivencia  con familiares que también las utilizan, que a su vez pueden contribuir a la disminución de la percepción de riesgo⁽²⁾ (como se señala en el estudio que se ocupa de este tema en relación con el consumo de alcohol) o del uso de estas sustancias. El uso de drogas ilegales también pone al adolescente en contacto con un  universo infractor, lo que completa la imagen del adolescente peligroso. Por lo tanto, vale la pena recordar que este adolescente es a la vez víctima y agresor. Los datos del informe de UNICEF sobre los adolescentes brasileños, reveló que en el año 2011:

- De los adolescentes, el 14%  están fuera de la escuela;

- De cada 100 jóvenes, 49 se encontraban en la escuela, y de ellos, sólo el 29% estaban en una serie  adecuada  a su  edad;

- Ochenta mil niños y adolescentes que viven en centros de acogida, un 24% debido a la pobreza y el 53% se encuentran en protección hace más de dos años;

- Las muertes, entre 15 y 19 años, el 43% fueron por homicidios y los adolescentes negros mostraron cuatro veces más probabilidades de ser asesinados que los blancos. La tasa de mortalidad por homicidio en la población general fue de 4,8%;

- Delitos contra la vida fueron cometidos por 0.013% de los adolescentes.

Estas cifras dan una dimensión del segmento sin protección, o para el cual se debe proponer cuidados si  queremos personas física y mentalmente sanas.

Referencias

1. Marcon SR, Sene JO, Oliveira JRT. Contexto familiar e uso de drogas entre adolescentes em tratamento. SMAD, Rev Eletrônica Saúde Mental Álcool Drog. (Ed. port.) [Internet]. jul-set 2015;11(3). In press.

2. Uribe Alvarado JI, Verdugo Lucero JC, Zacarías Salinas X. Relación entre percepción de riesgo y consumo de drogas en estudiantes de bachillerato. Psicol Salud. 2011;21(1):47-55.

2. Uribe Alvarado JI, Verdugo Lucero JC, Zacarías Salinas X. Relación entre percepción de riesgo y consumo de drogas en estudiantes de bachillerato. Psicol Salud. 2011;21(1):47-55.         [ Links ]